domingo, 29 de noviembre de 2009

Maslow y la salud mental de los personajes literarios

Abraham Maslow fue un psicólogo americano de gran influencia en la psicología posterior y cuyas enseñanzas se encuentran de plena actualidad aún hoy en día, muy especialmente su conocida teoría de la jerarquía de las necesidades. Su enfoque de la psicología era muy positivo y humanista. En concreto, uno de sus puntos de partida y de sus propuestas originales fue, en lugar de analizar a pacientes, a individuos enfermos, intentar sacar conclusiones a partir de todo lo contrario, de una muestra de personas sanas y autorrealizadas.

Estoy actualmente leyendo "Motivación y personalidad", una de sus obras más importantes. En dicho libro describe un experimento en que buscaba estudiar la salud mental, precisamente, en personas sanas y autorrealizadas. Fue un experimento sólo cuasi-científico y, en ese sentido, por ejemplo, parte de la muestra procedía de amigos y conocidos y otra parte de personajes históricos.

Lo curioso, y la motivación para este post, es que también consideró utilizar personajes literarios...pero dicho planteamiento resultó fallido. Maslow nos lo cuenta, aunque de una forma un tanto velada:

"También esperábamos que se pudieran utilizar para las demostraciones los personajes creados por novelistas y dramaturgos, pero ninguno resultó utilizable en nuestra cultura y nuestra época (lo cual era en sí mismo un hallazgo que daba qué pensar".

Más adelante, y cuando describe algunas de las características de estas personas sanas y autorrealizadas nos habla de las imperfecciones que muestran estas personas. Pero, de nuevo, vuelve a traer a colación lo literario cuando afirma:

"El error corriente que cometen novelistas, poetas y ensayistas sobre los buenos seres humanos es presentarlos tan buenos que parecen caricaturas, de forma que a nadie le gustaría parecerse a ellos".

Y continúa unas líneas más adelante:

"Yo creo que la mayoría de los novelistas que han intentado retratar a la gente buena (sana) hacían este tipo de cosas, metiéndolos en camisas ajustadas o convirtiéndolos en marionetas, o haciendo proyecciones irreales de ideales no verdaderos, en vez de dejarlos ser los individuos vigorosos, de corazón, lo fuertes que realmente son ".

¿ Cuánto hay de razón en lo que afirma Maslow ? ¿ Es cierto que los escritores no han sabido crear tipos creíbles de personas sanas y autorrealizadas ? ¿ Es que sólo han sabido dibujar a personas con problemas, mentalmente desequilibradas o insanas ? ¿ Es que cuando nos describen a personas positivas e idealistas sólo saben crear caricaturas poco creíbles ?

¿ Tendrá todo esto algo que ver con ese gusto por lo sombrío que ya mencionábamos en algún post anterior?

Maslow no era literato, pero una advertencia suya sobre los tipos psicológicos de los personajes literarios, creo que bien vale una reflexión.

2 comentarios:

@scen dijo...

Es posible que muchos personajes literarios sean así, como dice Maslow, pero ahí está la diferencia entre un buen y un mal escritor, en que sepa crear bien un personaje, en que resulte creíble. Para mí es uno de los factores más importantes de una novela, que los personajes, buenos o malos, listos o tontos, simpáticos o antipáticos, parezcan reales. Y hay grandes escritores que lo han conseguido.
La jerarquía de las necesidades la conocí no hace demasiado tiempo y fue un grato descubrimiento. Creo que encierra una verdad muy real, palpable y con la que casi todos estaremos de acuerdo.
Un saludo.

Ignacio G.R: Gavilán dijo...

Estoy de acuerdo, @scen. De alguna manera perece que Maslow lo que nos está diciendo es que tradicionalmente los escritores han logrado crear personajes más creíbles, más reales, cuando nos hablan de "los malos" y que han estado bastante menos acertados cuando lo han intentado con "los buenos".